PALACIO DE AIZKOLEGI



En el palacete de Aizkolegi, un conjunto de vidrieras neoplaterescas, hoy en día desmontadas, decoraron el salón.
La ornamentación con grutescos recuerda a las vidrieras del Banco de España, en Madrid, encargadas a la Casa Mayer de Munich en 1889 y a los Hermanos Maumejean en la ampliación del edificio. Compuestas por finas líneas y sombreados, pintados con grisalla, y detalles marcados con amarillo de plata dan forma a estas delicadas vidrieras. Los plomos están pintados actualmente pero podrían estar dorados en origen. Son la huella de la refinada decoración que vistió este palacete actualmente en ruinas.
